El año pasado durante todos los domingos a las 11:30 se realizó el taller de niños “Amigos de Jesús y María”, una instancia en la cual los niños y niñas pudieron reconocer a Jesús en su vida, conocer su historia y relacionarse de forma más íntima con él.
Para Jessica De Medina, este taller tiene una importancia única para los que asisten: “Nuestros niños necesitan y quieren conocer a Jesús, a su mejor amigo. Los niños tienen una inclinación natural a las cosas Dios, les gusta rezar, cantar y adorar a Jesús en el Sagrario. El Taller “Amigos de Jesús y María” tiene como propósito llevar al niño al encuentro con Jesús y María, a través de la oración. De este modo, los niños encuentran a su mejor amigo Jesús a quien le dan gracias, le piden perdón, le piden por sus necesidades y las de otros y aprenden también a alabar a Dios”.
El año pasado el taller finalizó con un cumpleaños de Jesús, aludiendo a la Navidad, en la cual los niños y niñas le regalaron distintos presentes a Jesús, regalos que tenían que ver con actitudes, como por ejemplo, comerse su comida, compartir sus juguetes, acordarse siempre de rezar y lo más importante, ofrecer su corazón a Jesús en su cumpleaños. Este año 2016, el taller comenzará en abril y se está pensando partir con una actividad en la que se presente a Jesús a los niños como su mejor amigo y a María como su madre querida que está en los cielos.
Luego se seguirá con diferentes temáticas de acuerdo a los tiempos litúrgicos que vayan ocurriendo, haciendo mucho énfasis en el Año de la Misericordia, siempre con actividades didácticas que ayudan a los niños a acercarse más a Jesús y a través de Él, a su Padre Dios. Jessica nos cuenta que sus metas son altas y que buscan que cada vez la convocatoria de niños y niñas sea más alta: “que sea necesario tener no solo un grupo, sino varios grupos divididos por edades y, por supuesto, también varios líderes para esos grupos. El sueño de nosotros es que existan varios talleres de Amigos de Jesús y María en muchas otras parroquias y, de ser posible, inclusive en lugares como hospitales y escuelas.”
Para Jessica este taller ha significado algo muy relevante en su vida. Es algo que la motiva mucho porque siente que realmente está poniendo la semilla de Dios en los corazones de muchos niños y niñas: “Es anunciar el Evangelio como nos pide la Palabra de Dios. Es Llevar a los más pequeños el mensaje del Amor de Dios y las enseñanzas de la Fe Católica. Una de las cosas que me motiva es saber que, con el favor de Dios, esa semilla que ahora sembramos en estos niños será fuente de felicidad para ellos. Y que, como dice Proverbios 22:6: ‘educa o instruye al niño en su camino y cuando fuere viejo no se apartará de Él’, ¡esa es nuestra esperanza!”.
Invitamos con mucho cariño a todos los niños y niñas que quieran participar de este maravilloso taller. Prontamente les estaremos contando cuándo se iniciará formalmente este año 2016. ¡No se lo pueden perder!
