Este viernes 18 de agosto, como Iglesia Católica, celebramos el santoral de San Alberto Hurtado, figura destacada en la historia religiosa y social de Chile.
Nació en Viña del Mar en 1901, fue un abogado, sindicalista y sacerdote jesuita que consagró su vida a servir a los más necesitados. Su legado trasciende las barreras del tiempo y sigue inspirando a generaciones a comprometerse con la solidaridad.
San Alberto Hurtado es muy importante para nosotros debido a su profundo compromiso con los pobres y los vulnerables. Su famosa frase "dar hasta que duela" encapsula su filosofía de vida y su dedicación a ayudar a los demás sin reservas. Una de sus obras más relevantes es la fundación del Hogar de Cristo, institución sin fines de lucro que brinda apoyo a personas en situación de extrema pobreza.
Fue un prolífico escritor y pensador. Sus escritos, como "Sindicalismo, historia, teoría y práctica" o "El Progreso de los Pobres", reflejan su compromiso con la lucha contra la pobreza y la promoción de la justicia en Chile. Ya lo decía otra de sus famosas prédicas: “No basta con dar pan al hambriento, es necesario también darle dignidad”.
Fue beatificado en 1994 y canonizado en 2005. En este Día de la Solidaridad, recordamos su vida y obra, y nos inspiramos en su ejemplo para seguir trabajando por un mundo más justo y solidario, donde la ayuda a los más necesitados sea un compromiso fundamental de cada uno de nosotros.
¡San Alberto Hurtado, ruega por nosotros!
Fuentes: