Recientemente, conocimos a la hermana María Crevillén Verdet, consagrada del Movimiento de Schoenstatt que compartió con nosotros su emocionante experiencia vocacional. A través de su testimonio, nos brindó su experiencia y llamado a la vida consagrada.
La hermana María manifestó que “cada uno de nosotros tiene una vocación especial. Cuando llegaba a la Iglesia experimentaba la presencia de Dios, lo cual me hacía muy feliz”. Su historia significó una experiencia inspiradora de cómo la fe y la dedicación pueden llevarnos a descubrir nuestra vocación y el llamado de Dios en nuestras vidas.
Recuerda que tenemos Adoración al Santísimo para orar por las vocaciones todos los jueves de 18:00 a 19:00 hrs.
Conoce más sobre su conmovedora historia viendo el video y las fotos al final de esta nota.