El papa Francisco en su mensaje Urbi et Orbi, el pasado domingo de Pascua, 9 de abril, pidió que obtengamos hoy la fuerza para perseverar en el bien, hacia el encuentro del Bien que no defrauda.
“Creemos en Ti, Señor Jesús, creemos que contigo la esperanza renace y el camino sigue. Tú, Señor de la vida, aliéntanos en nuestro caminar y repítenos, como a los discípulos la tarde de Pascua: «¡La paz esté con ustedes!»”
El Pontífice quiso desearles a todos, con alegría en el corazón: ¡Feliz Pascua!
“Que sea para cada uno de ustedes, queridos hermanos y hermanas —en particular para los enfermos y los pobres, para los ancianos y los que están atravesando momentos de prueba y dificultad—, un paso de la tribulación a la consolación”.
A todos dijo, que no estamos solos, Jesús, el Viviente, está con nosotros para siempre. Que la Iglesia y el mundo se alegren, señaló, porque hoy nuestra esperanza ya no se estrella contra el muro de la muerte; el Señor nos ha abierto un puente hacia la vida. (1)
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Fuentes:
Imagen: Vatican Media
