Un ambiente de celebración en comunidad se vivió en nuestra parroquia el domingo recién pasado en las Misas de 11:30 y 13:00 hrs.
Muchas familias llegaron con entusiasmo en busca de la gracia de nuestro Padre Celestial. En la Eucaristía se les entregó una bendición especial y un altar para orar en el hogar y mantener viva nuestra relación con Cristo. Luego, comieron ricos algodones de azúcar, animados por un organillero, y se sacaron fotografías para capturar estos bellos momentos.
El Señor se regocija de alegría cuando vamos a su casa acompañados por nuestros padres, abuelos y hermanos, ya que para su Reino es esencial este núcleo de amor, fe y sabiduría.
Isabel Harvey, coordinadora de la Pastoral de Familia y Misión, comenta que uno de los propósitos de la actividad es fomentar la participación de los niños en la vida cristiana, "a través de ellos podemos llegar a los padres y también a los abuelos, quienes tienen la misión de transmitirles la fe a sus hijos y nietos".
"La fiesta nos brindó un momento de compartir con el padre Francisco como familias y comunidad con mucha alegría, música, golosinas y fotografías.
Así estamos construyendo una parroquia viva y entusiasta que acoja con cariño a todos, tal como lo pide el papa Francisco", señala Isabel.
Te invitamos a revisar las fotos de está gran fiesta al final de la nota.