En el vuelo de regreso a Roma (Italia), luego de su visita apostólica a Ecuador, Bolivia y Paraguay, el Papa ha querido dar un mensaje a la Iglesia latinoamericana.
"La Iglesia latinoamericana tiene una gran riqueza. Es una Iglesia joven, y esto es importante. Una Iglesia joven con cierta frescura. También con cierta informalidad. Y también tiene una teología rica de búsqueda. Yo he querido dar ánimo a esta Iglesia joven y creo que puede darnos mucho a nosotros.
Digo algo que me ha impresionado mucho. En los tres países había por todas las calles grupos de padres, madres, con los niños. Nunca he visto tantos niños. Es una lección para nosotros, para Europa, donde el descenso en el número de los nacimientos asusta un poco. También las políticas para ayudar a las familias numerosas son pocas.