Luego del atentado terrorista efectuado por tres encapuchados islámicos en contra de la revista francesa Charlie Hebdo y que dejó una docena de muertos y once heridos en París, el Sumo Pontífice se unió a las oraciones por los fallecidos y heridos, y condenó con firmeza los acontecimientos.
El padre Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, indicó en palabras del Santo Padre que "la violencia homicida es abominable, nunca es justificable” y que “la vida y la dignidad de todos deben ser garantizadas y tuteladas con decisión. Cualquier instigación al odio debe ser rechazada, el respeto del otro debe ser cultivado".
En la misa realizada hoy en Santa Marta, el Papa Francisco señaló: "Recemos, en esta Misa, por las víctimas de esta crueldad. ¡Muchas! Y también pidamos por los crueles, para que el Señor cambie sus corazones".